Intervención del viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Elio Rodríguez Perdomo, en la XI Conferencia Italia América Latina y Caribe
Roma, 12 y 13 octubre de 2023.
Retos de un mundo que cambia. ¿Cómo enfrentar juntos los nuevos desafíos globales? La emergencia climática y medioambiental (con especial atención al Caribe). Las cadenas de valor y el suministro de recursos. La seguridad energética y alimentaria desafiada por la compleja situación internacional actual.
Estimadas Subsecretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de la República Italiana, Maria Tripodi y Secretaria General de la Organización Internacional Italo-Latinoamericana, Antonella Cavallari:
Excelencias, estimados colegas:
Agradezco al gobierno italiano por la organización de este importante evento, que nos permite reflexionar sobre temas acuciantes para nuestros países.
En un contexto de crisis global, sistémica y multidimensional, se acrecienta el riesgo de fracasar en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En la reciente Cumbre celebrada en Nueva York, se constató el estancamiento e incluso retroceso en la aplicación de la Agenda 2030 a nivel global.
Los avances para garantizar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos no poseen la celeridad requerida. Los flujos financieros internacionales para energía limpia continúan decayendo.
El calentamiento global ha alcanzado 1,1ºC por encima de los niveles preindustriales. Es probable que alcance o supere el crítico punto de inflexión de 1,5ºC en 2035. Los gases de efecto invernadero registran concentraciones récord. El nivel medio del mar ha alcanzado un nuevo máximo. No podemos continuar desoyendo las alarmas que alertan sobre la inminente catástrofe climática.
Víctimas de un injusto orden económico internacional, los países más pobres y vulnerables sufren los peores efectos de estos desafíos mundiales sin precedentes.
Para los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo como el nuestro, y la mayoría de los países del Caribe, el desafío es aún mayor, debido a nuestras vulnerabilidades en cuanto a tamaño, capacidades económicas y exposición a choques exógenos.
Es vital la movilización de recursos financieros adicionales y el acceso justo a ellos por parte de los países en desarrollo, la promoción de la cooperación Norte-Sur, la transferencia de tecnología, la creación de capacidades y un papel más activo de los países desarrollados en la lucha contra el cambio climático, de acuerdo con su responsabilidad histórica.
Constituye una exigencia permanente el cumplimiento de la meta de Ayuda Oficial al Desarrollo por parte de los países desarrollados, comprometidos a destinar el 0,7% del PIB para este fin.
A mediados de septiembre, el Grupo de los 77 y China celebró una exitosa Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno en La Habana sobre el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación en el contexto del desarrollo. La cita hizo un llamado al fortalecimiento de la cooperación entre los países del Sur; e instó a los países desarrollados a movilizar con urgencia los medios de implementación para reforzar las capacidades científicas y tecnológicas del Sur en las esferas de la alimentación, salud, educación, energía y el enfrentamiento al cambio climático.
La crisis ambiental y climática actual debe ser enfrentada desde la acción colectiva y la cooperación internacional, incluidas la cooperación Norte-Sur, Sur-Sur y Triangular, bajo el respeto a los principios de responsabilidades comunes, pero diferenciadas, equidad y respectivas capacidades.
Abogamos por el éxito de la venidera Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático COP 28, a celebrarse en Dubái.
Con el objetivo de consolidar la unidad del Sur y promover la concertación ante las negociaciones que se desarrollarán en la COP28, Cuba, en su condición de Presidente del Grupo de los 77 y China, ha convocado a una Cumbre de Líderes del Grupo a celebrarse el día 2 de diciembre, en los márgenes de la Cumbre de Acción Climática de la COP; iniciativa sin precedentes en el marco de una Conferencia de las Partes.
Una transición ecológica justa no puede pasar por alto el objetivo de erradicar la pobreza estructural existente en nuestros pueblos, el fomento de otras formas o modelos de producción y consumo, entre los que se encuentra el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos, lo cual no será posible sin el adecuado financiamiento a los países en desarrollo. Consideramos que la transición energética mundial debe ser justa, inclusiva y equitativa.
El gobierno cubano se ha trazado como objetivos elevar la eficiencia energética, el desarrollo de fuentes renovables de energía, reducir la generación de gases de efecto invernadero, mitigar el cambio climático y promover un desarrollo económico menos intenso en carbono. Nos hemos trazado la meta de incrementar para el 2030 hasta un 24% de la generación de electricidad sobre la base de fuentes renovables de energía.
Las múltiples crisis internacionales han ocasionado también perturbaciones en las cadenas de suministro, afectando elementos clave de los sistemas agroalimentarios, lo que ha puesto en peligro la garantía del derecho a la alimentación, la seguridad alimentaria, la nutrición, y salud de nuestros pueblos. Los países en desarrollo somos particularmente afectados por esta situación.
Cuba realiza extraordinarios esfuerzos para garantizar el derecho universal a la alimentación de todos los cubanos a través de una canasta básica familiar. Se trabaja en la implementación del Plan de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional.
Reconocemos que un comercio abierto, no discriminatorio, transparente y basado en normas, es esencial para crear sistemas alimentarios más inclusivos, productivos y resilientes.
Cuba valora altamente la postura de Italia, inclinada al fortalecimiento de sus nexos con América Latina y el Caribe. Consideramos que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, debe y puede desempeñar un creciente papel de interlocutor con Europa y con Italia. La Conferencia Italia – ALC puede contribuir a esa aspiración.
Estimado colegas e invitados:
Agradecemos al Gobierno italiano, a su Cancillería y al Instituto Ítalo-Latinoamericano por este espacio de diálogo, con la convicción de que los vínculos históricos y culturales entre el pueblo italiano y América Latina y el Caribe, continuarán contribuyendo a la profundización de las relaciones entre ambas regiones.
Aprovecho este espacio para agradecer el tradicional apoyo de Italia y de las naciones latinoamericanas y caribeñas en la justa batalla por el levantamiento del bloqueo que se impone a Cuba desde hace más de 60 años, que es el principal obstáculo al desarrollo económico y social de mi país. El bloqueo se ha reforzado, con acciones tan espurias como la de incluir y mantener a Cuba en una unilateral lista de países que patrocinan el terrorismo, lo que potencia los negativos efectos de los problemas globales abordados en esta sesión. La CELAC y la Unión Europea han ratificado en la reciente Cumbre de Bruselas el total rechazo a esa política.
Concluyo con las palabras del presidente cubano Miguel Díaz Canel en su reciente intervención ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. “¡Cuenten siempre con Cuba para defender el multilateralismo y promover juntos la paz y el desarrollo sostenible para todos!”
Muchas gracias.
(Cubaminrex-Embacuba Italia)